El Órgano Electoral Plurinacional (OEP) ha dejado de ser independiente para convertirse en un “apéndice” del Órgano Ejecutivo, permitiendo que avasalle sus facultades y funciones, como la destitución de vocales de los Tribunales Electorales Departamentales (TED), manifestó el analista político, Paul Coca.
Coca se refirió al tema en coincidencia con el relator Especial de la Organización de Naciones Unidas (ONU) sobre la Independencia de Magistrados y Abogados, Diego García-Sayán, quien afirmó que la destitución de vocales de los TED socava la independencia del Órgano Electoral y atenta contra el Estado de Derecho.
“Esto es un atropello y un abuso del Órgano Ejecutivo. El Órgano Ejecutivo nos tiene acostumbrados a realizar este tipo de acciones y sobre todo contra la entidad electoral, que de un tiempo a esta parte tiene mucha significación e importancia porque administra los procesos electorales”, sostuvo Coca.
Asimismo, cuestionó el “silencio” del Tribunal Supremo Electoral, “eso es lo peor de todo, en Bolivia desde la gestión de Evo Morales nos hemos acostumbrado a que los órganos del Estado sean abusados y prácticamente los órganos no quieran pronunciarse y afianzándose en el mandato constitucional que tienen”.
Lamentó que el OEP haya “dejado de ser independiente para pasar a ser un apéndice del Movimiento al Socialismo y del Ejecutivo”, comentó, al observar que los órganos del Estado “se están dejando avasallar”, sin que exista una reacción a este tipo de “abuso”.
Vocales de seis TED que habían sido designados el 2019 por la entonces presidenta Jeanine Áñez fueron destituidos por el presidente del Estado, Luis Arce. No obstante, estas autoridades según la Ley 018 del Órgano Electoral gozaban de inamovilidad.
Por otro lado, cuatro vocales del TED Beni fueron cesados de sus funciones como consecuencia de un amparo constitucional, después que administraron dos procesos electorales, las generales en octubre de 2020 y las subnacionales el 2021.
El Relator Especial de la ONU expresó el viernes su preocupación sobre estas acciones que afectan las garantías jurídicas y democráticas de la población, a tiempo de señalar que está siguiendo de cerca la situación que atraviesa el Tribunal Supremo Electoral (TSE) en Bolivia.
“Bolivia: Son preocupantes los actos que vienen afectando la integridad de los tribunales electorales en Bolivia. Esto es grave para el Estado de Derecho. Sigo con atención acciones que podrían socavar la esencial independencia de estos órganos judiciales”, escribió García-Sayán.
Coca manifestó que la designación de los vocales el 2019 no fue producto de la arbitrariedad ni de la presión, sino parte de un acuerdo nacional para viabilizar y acelerar la celebración de las elecciones generales, después que los resultados de los comicios fueron anulados.
“Fue fruto del consenso y no de la imposición de Jeanine Áñez”, explicó el analista político, quien dijo que estos cambios son preocupantes, pero que no tiene resonancia porque en este momento no hay procesos electorales en curso.
Mario Orlando Parada, en Santa Cruz; Ayda Alarcón, en Beni; Cemia Aragón, en Pando; Julio Mújica Quispe, en Potosí; Nataly Vargas, en Tarija y Juan Laura Andrade en Oruro, eran los seis vocales departamentales electorales designados por el Ejecutivo el 2019, los seis ejercían sus funciones cuando fueron sorpresiva y abruptamente destituidos el 30 de junio.
Mientras que en Beni quedaron cesados en sus funciones: Zulema Bethzabe Chávez Gutiérrez, Tania María Vargas, Luis Miguel Apinaye Sosa, Ottomar Coímbra Menacho. Dejaron de asistir a sus funciones, después que la Sala Constitucional de Beni determinó la anulación del proceso de selección de vocales electorales hasta el vicio más antiguo, es decir, hasta que la Asamblea Legislativa Departamental beniana llevó adelante la convocatoria.
Foto: OCD Bolivia